Siempre da gusto volver a la ciudad medieval de Toledo en España, que de por sí es un encanto lleno de encantos. Allá arriba, sobre la loma, se encuentra esta ciudad maravillosa que desde los llanos podemos apreciar. Sus calles estrechas, su historia, monumentos, templos, todos evoca un tiempo pasado y glorioso.
Toledo es una ciudad que parece sacada de un cuento, como tan bien lo expuso Miguel de Cervantes a través de sus obras. Tal ha sido la importancia de Cervantes para Toledo, que al final de la subida precisamente, por la calle Miguel de Cervantes y rumbo a el Arco de la Sangre, se encuentra su estatua en bronce. Esta escultura, obra de Oscar Albariño en honor al escritor, fue inaugurada en el 2006. Este homenaje llega casi 400 años después de su muerte.
Así encontramos a Cervantes, como si prestara vigilancia a la entrada de Toledo y la Plaza de Zocodover, justo delante de la Puerta de los Caballos entrando por el Arco de la Sangre.