La primera vez que visitamos la ciudad andaluza de Córdoba, no pudimos entrar a su Alcázar, por ser lunes. Lo lamentamos muchísimo y decidimos concentrarnos en su exterior. Nos llamó mucho la atención sus muros, altos y muy sobrios, una arquitectura exterior muy simple, de tipo militar. Tiene una forma casi cuadrada, contando con cuatro torres. De simple vista, las palmeras y árboles que se encuentran en primer plano pueden ocultar un poco su belleza.
Nos asomamos por las rejas de un jardín que se ubica a su lado derecho, si uno se detiene frente a la entrada principal. Cuando observamos la belleza que se asomaba entre los barrotes de aquellas rejas, nos prometimos que regresaríamos, y así lo hicimos. Lo que nos esperaba en su interior rebasó toda la hermosura imaginada.
El Alcázar de los Reyes Cristianos está ubicado en uno de los márgenes del río Guadalquivir. En este solar majestuoso, han convivido romanos y visigodos, con los de origen árabe, siendo el lugar predilecto de los distintos gobernantes de la ciudad. El monarca Alfonso XI de Castilla ordenó su construcción en el año 1328 sobre el antiguo Alcázar andalusí, antes residencia del gobernador romano y la aduana.
El Alcázar está declarado Bien de interés cultural desde el año 1931. Forma parte del centro histórico de Córdoba, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1994. Se ha convertido en el segundo monumento de pago más visitado de Córdoba después de la Mezquita Catedral.
Una vez se accede por la puerta bajo la torre de los Leones, nos da la bienvenida la estatua de Alfonso X el Sabio realizada por Juan Polo Velasco en 1965.
En una de las primeras galerías de acceso, se exhibe un sarcófago pagano del año 225 de nuestra era. Se trata de un enterramiento familiar realizado en un bloque de mármol de Carrara ricamente labrado en tres de sus cuatro caras. Fue hallado en Córdoba en el 1958 en la Huerta de San Rafael del Brillante. El motivo principal de su parte frontal es la puerta de Hades o del más allá que aparece entreabierta.
El camino continúa hacia el Salón de los Mosaicos, donde se exhiben ocho mosaicos romanos impresionantes, encontrados entre los años 1958-59 en unas obras de remodelación de la plaza de la Corredera. Estos mosaicos datan de los siglos II y III, y formaban parte de una domus romana. Debido a que el Alcázar también estaba siendo restaurado, se decide trasladar ocho de las doce obras a esta antigua capilla para su decoración y desde entonces se le comienza a denominar el Salón de los Mosaicos.
Bajo el Salón de los Mosaicos se encuentran los Baños Reales de doña Leonor (cerrado al publico durante nuestra visita), amante de Alfonso XI, con la que tuvo diez hijos ilegítimos. Estos baños de estilo mudéjar, presentan tragaluces con forma de estrella de ocho puntas. Fueron estructurados en cuatro salas: sala de vestuario, sala fría, sala templada y sala caliente. La caldera y el horno, que suministraban de agua caliente a los baños, se encontraban bajo la Torre del Homenaje.
Como mencionamos anteriormente, el Alcázar cuenta con cuatro torres, dando al edificio una forma casi cuadrada.
- La torre del Homenaje, de planta octogonal, se encuentra en la esquina noreste. Dicho nombre proviene de los juramentos que realizaban en este lugar para proteger el Alcázar. Anteriormente, fue conocida como torre del Reloj debido a un reloj que había en la misma y que fue desmontado a principios del siglo XX.
- La torre de los Leones, de planta cuadrada, se encuentra en la esquina noroeste. En la base de esta torre se halla actualmente la puerta por la que entran los visitantes, aunque dicho acceso fue abierto en 1662. Se trata de la torre más antigua, que data del siglo XIII. Recibe su nombre de unas gárgolas con forma de león que se encuentran en su parte superior.
- La torre de la Inquisición, de planta circular, se encuentra en la esquina suroeste. Recibe su nombre debido a que durante siglos sirvió de archivo del Tribunal de la Santa Inquisición. También fue conocida como torre de los Jardines.
- La torre de la Paloma, de planta cuadrada, se encuentra en la esquina sureste. La torre original fue demolida a mediados del siglo XIX, siendo la actual una reconstrucción que data de la segunda mitad del siglo XX. También fue conocida como torre de la Vela.
De los dos patios que encontramos en el Alcázar de los Reyes Cristianos, es el Mudéjar, ubicado en su lado occidental que más llamó nuestra atención por su gran belleza. Se trata del patio que mejor ha conservado su disposición original, ya que, durante la restauración de mediados del siglo XX, tras levantar la arena que cubría el antiguo patio de presos, a un metro de profundidad, apareció la estructura original. Es de planta cuadrada y se encuentra rodeado de galerías porticadas. El patio posee en su centro una fuente surtidora y dos estanques situados a ambos lados de este que invitan al visitante a refrescarse y relajarse.
El otro patio, el Patio de las Mujeres era también conocido como patio Oriental, debido a su orientación dentro del complejo. Recibe su nombre de la época en la cual el Alcázar fue utilizado como cárcel, ya que en este patio era donde se encontraba la sección femenina de la misma.
Los jardines que encontramos en el Alcázar son producto de la transformación de la antigua Huerta del Alcázar. Una superficie de aproximadamente 55.000m² que fue convertida en jardines hermosos con especies de palmeras, cipreses, naranjos y limoneros, rodeando muy elegantemente sus fuentes y estanques. Los jardines se estructuran en tres niveles: el Jardín Alto, el Jardín Medio y el Jardín Bajo.
Además, una de las vistas que consideramos muy bonitas son las del Paseo de los Reyes, un paseo bordeado por una fila de cipreses cilíndricos y dividido en dos por dos estrechos estanques. En este paseo se hallan varias esculturas, de los monarcas castellanos que construyeron el Alcázar, situadas sobre pedestales repartidos entre los setos. El paseo termina con la escultura de los Reyes Católicos frente a Cristóbal Colón.
Hoy, los jardines siguen regándose desde el acueducto romano Aqua Fontis Aureae que trae agua desde Sierra Morena. Es la fuente de piedra que recibe el agua de la sierra, para luego llegar a la primera de las albercas, para caer a otros pilones y fuentes hasta llegar al final de los jardines.
No fue hasta 1951, cuando Córdoba entró a formar parte de ciudades que mantuvieron alguna relación con Isabel la Católica, cuando el entonces alcalde Antonio Cruz Conde decide recuperar este espacio para la ciudadanía y aprueba un proyecto de restauración apoyado por la Real Academia de Córdoba.
Actualmente, el Alcázar es sede de diferentes eventos municipales, como la celebración de bodas civiles, así como sede y exposición de presentaciones variadas.
Al final de este hermoso recorrido, nos miramos para decir, ¡lo logramos! Rebasamos aquellas rejas por donde nos asomamos hace cerca de cinco años, para disfrutar los distintos espacios, rodeados de estanques, fuentes y jardines hermosos del Alcázar de los Reyes Cristianos de la hermosa ciudad de Córdoba.
Fuentes consultadas:
https://es.wikipedia.org/wiki/Alc%C3%A1zar_de_los_Reyes_Cristianos
https://www.turismodecordoba.org/alcazar-de-los-reyes-cristianos
https://alcazardelosreyescristianos.cordoba.es/?id=600
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