La prueba de lo destructivo que fue el terremoto de 1755 en Portugal es la Iglesia o Convento do Carmo. Aún en ruinas, se puede observar la grandeza de la que fue la principal iglesia gótica de Lisboa.
El Convento de la Orden do Carmo u Orden del Carmen está localizado en una posición privilegiada sobre el Rossio (Plaza de D. Pedro IV) y en pleno Chiado. El Convento fue mandado a construir en 1389 por el condestable D. Nuno Álvares Pereira.
Durante un tiempo, el convento pasó a ser una dependencia militar. Además, durante la Revolución de los Claveles, fue en el Carmo donde el presidente del Consejo del Estado Nuevo, Marcelo Caetano, se refugió de los rebeldes.
Actualmente, estas ruinas componen la sede del Museo Arqueológico do Carmo. Junto con la Catedral, forman parte de los pocos restos que quedan en la ciudad de la época medieval.