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Catedral de Málaga

Frente a la Plaza del Obispo de Málaga, se alza monumentalmente la Santa Iglesia Catedral Basílica de la Encarnación, templo considerado una de las joyas renacentistas más valiosas de Andalucía, España. La historia de la Catedral está íntimamente relacionada con la Mezquita Mayor sobre la cual fue construida, emplazada en el interior del recinto amurallado árabe. Su origen data del 1487, año en el que la ciudad de Málaga fue conquistada por las tropas castellanas. Fue entonces cuando la Mezquita Aljama se convirtió en Catedral.

Hasta el año 2012, fue el segundo edificio más alto de Andalucía, solo superado en su torre por la Giralda de Sevilla. La altura de sus bóvedas a nivel español solo es superada por la Catedral de Palma de Mallorca, siendo el templo catedralicio de Málaga, uno de los quince templos europeos con mayor altura en sus naves. La Catedral fue consagrada el 3 de agosto de 1588. Fue en el año 1855, que el papa Pío IX declaró la catedral de Málaga como Basílica menor.

Iniciada su construcción en la primera mitad del siglo XVI y continuada a lo largo del XVII y XVIII, la Catedral de Málaga es considerada como una obra inacabada. Le faltaba por construir el tejado, la sacristía mayor, la espadaña central, la ornamentación escultórica, entre otros elementos. Además, quedó sin construir la torre sur, lo que dotó al templo del aspecto que hoy se aprecia y es el origen de su nombre popular entre los malagueños, «La Manquita».

La Catedral de Málaga es una síntesis de estilos arquitectónicos entre los que prevalece el Renacimiento sobre el primer Gótico de la construcción antigua y los elementos barrocos añadidos desde principios del siglo XVIII. Es precisamente, a principios del siglo XVIII, que se retomó la finalización de la Catedral, cuyas obras habían quedado interrumpidas casi un siglo antes. Mediante un arbitrio o impuesto a los barcos que llegaban al puerto de Málaga, se pudieron cubrir los grandes gastos de la obra. Aún hoy, continúan los procesos sobre la finalización de la Catedral de Málaga. El objetivo es tenerla finalizada para la celebración, del quinto centenario de su construcción después de más de dos siglos con las obras paralizadas, lo que la convertiría en una joya del Renacimiento español. Algunos proponen esa celebración para el 2028.

Las portadas de la catedral son conocidas como la de las Cadenas, frente al Palacio de Zea-Salvatierra con sus jardines y su patio de los naranjos; la principal, conocida como la de la Plaza del Obispo y, aunque no está integrada en la Catedral, la fachada del Sagrario.

El cuerpo central de la fachada está dividido en dos alturas y tres partes separadas por monumentales columnas de orden corintio construidas sobre unas bases altas. En el piso inferior hay tres arcos monumentales y en ellos, columnas de mármol rojizo enmarcan las puertas.

La puerta principal se remata con columnas salomónicas. Sobre las puertas hay unos medallones. Los de las puertas laterales representan a los patronos de Málaga, San Ciriaco y Santa Paula, mientras el central representa la Anunciación del Señor, obra labrada en 1743 por el escultor barroco Antonio Ramos.

La única fachada gótica del complejo catedralicio está situada en el lateral norte y pertenece a la iglesia del Sagrario. Fue ordenada por el Obispo Ramírez de Villaescusa a principios del siglo XVI y destaca por su rico programa iconográfico.

El ábside del templo, perteneciente al siglo XVI, es de gran volumen y aunque le falta decoración, cuenta con unas vidrieras de colores muy hermosas que ayudan a que la luz fluya en interior del edificio. En la parte de abajo, encontramos los triples arcos, mientras que, en la parte superior, encontramos arcos simples acompañados de ventanas redondas.

La torre norte se eleva hasta los 84 metros de altura y 92 metros si medimos hasta el arpón, siendo la catedral más alta de Andalucía. Situada a la izquierda de la fachada principal, sus dos primeros cuerpos tienen las mismas proporciones que las dos alturas de la estructura central. Por el contrario, la torre sur está sin terminar, rematada por los fustes de sus columnas al aire.

En cuanto a la forma de su plano, es de cruz latina compuesta por tres naves de igual altura (41.79 metros), siendo la del centro de mayor anchura. Posee una cabecera de planta poligonal con girola. Cuenta con capillas laterales en todo el perímetro de la iglesia salvo los pies, con crucero sensiblemente resaltado, girola y ábside poligonal.

El Altar Mayor, obra de Diego de Vergara de 1541, es el espacio sacro principal de la Catedral de Málaga y es toda una belleza. En lo que se refiere a su estructura, se aprecia una planta semicircular formada por seis pilares unidos en la parte superior y sostenidos por arcos de medio punto. Sus muros cuentan con ventanas elevadas entre columnas corintias estriadas y cubierta con una bóveda nervada hermosa.

El tabernáculo, situado al centro, está rodeado por dos niveles ricamente decorados en dorado. En el nivel bajo, en torno al tabernáculo, se observan las pinturas que recogen escenas de la Pasión de Cristo; sobre el friso, los bustos de los Padres de la Iglesia y de los profetas y antecedentes familiares de Jesucristo. En el nivel superior, se sitúan las figuras de cuerpo completo de una serie de mártires que derramaron su sangre por Cristo y que representan a la iglesia triunfante.

El Coro de la Catedral de Málaga es uno de los conjuntos escultóricos más sobresalientes del Barroco español del siglo XVII. Es una de las estancias más valiosas de la catedral, obra cumbre de la carpintería barroca y uno de los trabajos más deslumbrantes del escultor Pedro de Mena.

La sillería coral está tallada sobre madera de cedro, caoba y granadillo de América, formando una traza rectangular dispuesta en tres niveles: los dos primeros disponen de 44 asientos y el último toma forma de ático.

En el primer cuerpo del Coro cuenta con un tallado decorativo con diversos motivos geométricos, vegetales, animales y alegóricos, así como cabezas masculinas y femeninas. El segundo cuerpo presenta como única diferencia los respaldos decorados en los que se ubican las esculturas de La Virgen María Coronada rodeada por Apóstoles, Evangelistas, Doctores de la Iglesia y un amplio abanico de Santos y fundadores de órdenes religiosas. El tercer y último cuerpo del coro cuenta con una serie de cabezas femeninas enmarcadas por molduras y coronadas con cresterías.

Los dos órganos, se alzan sobre los laterales del coro, de trompetería horizontal, son obra de Julián de la Orden realizado entre los años 1779 y 1781. Los dos órganos son prácticamente iguales, salvo en la longitud de alguno de sus tubos. También se diferencian por el sonido. Poseen más de cuatro mil tubos magníficos, que lo convierten en un gran ejemplo de instrumentos musicales del siglo XVIII que, aún hoy, se conservan en buen uso.

El trascoro está presidido por un altar donde reposa una bella Piedad esculpida en mármol por los hermanos Pissanis. En las hornacinas laterales se veneran las tallas de San Juan y María Magdalena, realizadas al igual que las imágenes de las capillas laterales por el escultor malagueño del XIX Salvador Gutiérrez de León.

La Catedral de Málaga cuenta con un total de catorce capillas que a su vez se reparten entre: Capillas Nave del Evangelio, Capillas Nave de la Epístola y Capillas del Crucero.

En el interior de la Catedral de Málaga se observan una serie de obras de arte de gran valor, entre ellas están el retablo gótico de la Capilla de Santa Bárbara, el único que procede de la mezquita-catedral primitiva. Se trata de un conjunto de estilo gótico encargado en 1524 al escultor Nicolás Tiller y al pintor Francisco de Ledesma. El tapiado de esta capilla durante la Guerra Civil Española contribuyó a que la conservación del retablo.

En la Capilla de San Francisco se destaca el retablo de estilo castellano, del primer periodo barroco del siglo XVII. Está compuesto por una presentación se describen y representan a los santos y santas de la orden franciscana. Se trata de la primera orden Franciscana que se estableció en la ciudad de Málaga. Además, se encuentran los sepulcros del siglo XVI.

El origen de la Capilla de la Encarnación está en el obispo Fray Bernardo Manrique, principal promotor de las obras de la Catedral en el siglo XVI, quien reservó este espacio para su enterramiento. El estilo del retablo es clásico y el mausoleo que se encuentra en su lado izquierdo pertenece al primer obispo que se ocupó de la composición de la capilla, Fray Bernardo Manrique. Se trata de la única pieza original que se conserva de la capilla primitiva.

En la catedral se encuentra el Museo Catedralicio, actualmente ubicado en el área de la antigua Sala Capitular, cuenta con un bello artesonado del XIX, con obras de la propia Catedral y de otros lugares.

Luego de un proceso de adaptación y construcción de pasarelas, el 12 de mayo de 2015, se abrió al público el acceso a las cubiertas de la Catedral. Se trata de una visita guiada de aproximadamente una hora, pudiendo disfrutar arriba unos 30 minutos. Desde las cubiertas de la Catedral de Málaga se puede disfrutar de una panorámica hermosa de la ciudad que incluye la Alcazaba, el Gibralfaro y la cubierta y la torre del monumento. Como siempre decimos, aún con el reto de la cantidad de escalones que haya que subir, la experiencia y las vistas bien valen la pena. Por lo mismo, compartimos el video corto que tomamos desde las cubiertas de la Catedral de Málaga.

 

 


Fuentes consultadas:

  • https://es.wikipedia.org/wiki/Catedral_de_M%C3%A1laga
  • http://www.malagaturismo.com/es/recursos-turisticos/detalle/catedral-de-nuestra-senora-de-la-encarnacion/132
  • https://malagacatedral.com/la-catedral/historia/
  • https://www.malaga.es/es/turismo/patrimonio/lis_cd-3808/catedral-de-malaga-o-de-la-encarnacion