En Tomar, Portugal, tuvimos la oportunidad de visitar el Acueducto de los Pegões en un Tuc Tuc con nuestro guía Ricardo. Fue una gran sorpresa para nosotros y hasta podemos decir que toda una aventura.
Resultó muy interesante la información que Ricardo compartió con nosotros y que nos hizo entender y apreciar mucho más la importancia que tuvo este acueducto en términos de diseño e ingeniería.
Con el fin de abastecer de agua al Convento de Cristo en Tomar, en el 1593, durante el reinado de Felipe I de Portugal se comenzó a construir este acueducto bajo la dirección de Filippo Terzi, ingeniero italiano y arquitecto del Rey. La obra fue completada en el 1614 por Pedro Fernando de Torres.
Este sistema recorre cerca de 6 kilómetros y cuenta con 180 arcos. Compuesta por arcada simple y por dos hileras de arcos superpuestos.
En las zonas de mayor declive llegan a alcanzar una altura de 30 metros (sobre 98 pies). El diseño de este acueducto cuenta con arcos de medio punto (estilo romano) y arcos apuntados, o arco ojival, característico de la arquitectura musulmana. El uso de los arcos apuntados sirven de apoyo, dándole más fuerza y estabilidad al acueducto.
Además, el sistema cuenta con dos edificios abovedados con pila central para decantación del agua en sus dos extremos.
El proceso separa los sólidos del líquido.
El diseño al estilo de culebra (serpiente/ondulada) ayuda a controlar la velocidad con la cual viaja el agua por el acueducto.
El acueducto se nutre de cuatro manantiales del pueblo de Pegões, del distrito Setúbal, queda al sur de Tomar, y al este de Lisboa.
Una experiencia que siempre recordaremos, el Acueducto de los Pegões, el Tuc Tuc y nosotros en ese paisaje hermoso de Tomar.