La Puerta del Sol de Toledo, España. Es una puerta medieval, que data del último cuarto del siglo XIV. Su estilo es mudéjar y construida para dar acceso a la ciudad amurallada. Recibe su nombre de un relieve en el lado extramuros, en el que entre otras figuras aparece un sol.
De gran influencia nazarí, se trata de una puerta de albarrana, es decir, situada fuera del recinto amurallado, que servía de defensa. Sin embargo, en este caso fue de carácter conmemorativo. El arco de acceso es un arco de herradura y es acogido por un arco de herradura apuntado. Está construida en piedra, sillería y mampostería. Las almenas, los merlones y el friso de la puerta son de ladrillo, con arcos lobulados entrelazados.