Una vez que partimos de Venezia, la ciudad de Bologna se convirtió en la opción obvia para otra parada en nuestra aventura por Italia. Bologna es la capital de la región de Emilia – Romaña en el norte de Italia. También es un importante centro de transporte, en particular su estación central, que sirve como cruce para todos los sistemas principales de trenes de Italia.
Bologna es conocida por su comida, sus iglesias y sus torres, veintiuna (21) aún existentes. Son precisamente las dos torres de Bologna; «Garisenda» y «Torre degli Asinelli», los símbolos más reconocidos de la ciudad.
Estos edificios están ubicados en la intersección de las arterias principales de la ciudad. La Via Castiglioni, Rizzoli y San Vitale con la Strada Maggiore. Estos lugares conducen a las cinco puertas de la antigua ciudad amurallada y medieval.
La torre «Garisenda» es la torre inclinada de Bologna. Una de las muchas torres inclinadas encontradas en Italia, aunque es la torre inclinada del campanario de la Catedral de Pisa la que más conocemos. La torre «Garisenda» alcanzó la altura de 47 metros (un poco más de 51 yardas), antes de que el suelo cediera por su peso.
La «Torre degli Asinelli» es la torre medieval inclinada más alta de Italia con 97 metros. Por supuesto, la inclinación no es tan severa como el campanario inclinado de Pisa.
Las dos torres se encuentran junto a la «Iglesia de los Santos Bartolomeo e Gaetano».
