A pocos pasos de la Catedral de Lisboa, subiendo por el Largo da Se en el barrio de Alfama, a la izquierda se encuentra un templo barroco del siglo XVIII. Se trata de la Iglesia de San Antonio, construida en el 1787 sobre lo que se alega fue el lugar de nacimiento del Santo. Aunque, su historia de edificación es más antigua.
Desde el Siglo XV se ubicaba una pequeña capilla en honor a San Antonio de Padua, que es como comúnmente se le conoce. El Rey Joao I de Portugal ordenó la construcción de un templo mayor que sería terminado bajo el reino del Rey Manuel I. Como tantas otras estructuras, el terremoto del 1755 dejó la iglesia parcialmente destruida. Su reconstrucción comenzó en el 1767, reabriéndose el templo nuevamente en el 1787, año en que las obras de reconstrucción fueron completadas. Solo la cripta de la estructura original sigue presente.
En la actualidad hay un pequeño museo al Santo junto a la Iglesia. Al momento de nuestra visita se observaban labores de restauración sbre la fachada del templo.