Aranjuez, En un Día, España, Paises

Aranjuez, España: Nuestro recorrido de un día

Aranjuez es uno de los municipios más visitados de toda la Comunidad de Madrid. Está a unos 50 kilómetros de la capital de España y tomando un tren desde la estación de Cercanías en Sol, en tan solo 50 minutos se llega a la estación del tren. Desde allí, tomar el bus #1 o #4 hasta la parada Abastos – Ayuntamiento con llegada en pocos minutos.

Aranjuez se convirtió en Sitio Real, gracias al interés de reyes españoles, tales como Felipe II, Felipe V y Carlos III. Estos lograron entre los siglos XVI al XVIII, intervenciones no solo en la construcción de estructuras palaciegas hermosas, sino también de jardines exuberantes, haciendo de esta ciudad una más agradable y acogedora. Eso llevó a que el Paisaje Cultural de Aranjuez fuera declarado Patrimonio Mundial de la UNESCO en 2001 y su casco antiguo cuenta con la categoría de Conjunto Histórico-Artístico.

Estación de Aranjuez

Como es costumbre, nuestro recorrido comienza desde la estación de ferrocarril. El de Aranjuez, es de estilo neomudéjar, muy bonito. Esta estación cuenta con un atractivo muy peculiar entre mayo y septiembre, se trata del Tren de la Fresa. Este tren histórico funciona desde 1984, recreando el primer trayecto ferroviario de la Comunidad de Madrid inaugurado por Isabel II en 1851. Inicia su recorrido de Madrid a Aranjuez, localidad famosa por sus fresas exquisitas, de ahí su nombre.

El centro de Aranjuez

Luego llegamos hasta el Ayuntamiento, que preside la plaza de la Constitución de Aranjuez. Ocupa un edificio del siglo XVIII inicialmente destinado a Casa de Empleados, luego se convirtió en Casa Consistorial. Su fachada de color rosa exhibe un reloj de más de cien años de antigüedad.

Dentro de la plaza se encuentra el monumento a Alfonso XII, erigido por “el pueblo de Aranjuez” en 1897. Y frente al Ayuntamiento se encuentra el Mercado de Abastos, edificación municipal de finales del XIX, construida en hierro, ladrillo y piedra.

Plaza de San Antonio

Lo primero que resaltó nuestra atención al llegar al Real Sitio y Villa de Aranjuez, fue la gran arcada que se encuentra de camino a la Plaza de San Antonio, o Plaza de la Mariblanca, como se conoce comúnmente. La arcada impresionante, prácticamente delimita esta plaza monumental.

En la Plaza de San Antonio se ubica la Fuente de la Mariblanca, frente a la Casa de Caballeros y Oficios. Esta fuente fue construida a mediados del siglo XVIII y originalmente estaba coronada por una estatua del rey Fernando VI mirando hacia el puente, como dueño de la población y recibiendo al visitante.

En 1760 la estatua fue sustituida por una de la Venus del jarro y en 1830 toda la fuente fue reelaborada con una ornamentación muy rica. El conjunto, obra de Alejandro González de Velázquez, está formado por lagartos, caracolas, amorcillos cabalgando sobre tritones y tres leones.

Tanto la Casa de Infantes, como la Casa de Caballeros y Oficios, ubicada enfrente se destacan con sus pasillos porticados y su sistema de arquerías en la Plaza de San Antonio. Por un lado, la Casa de Infantes, de estilo neoclásico, fue encargada por Carlos III para alojar a los infantes Gabriel y Antonio. Por otro lado, la construcción de la Casa de Caballeros y Oficios fue finalizada bajo el reinado de Carlos III y su función fue la de albergar el séquito de la corte y sus ministerios. En 1931, se le concedió la categoría de “Monumento Nacional” y actualmente cuenta con el estatus de Bien de Interés Cultural y está incluido dentro del perímetro del Paisaje cultural de Aranjuez, declarado Patrimonio de la Humanidad.

Iglesia San Antonio de Padua

Y es precisamente en la plaza de San Antonio, en su extremo sur, donde se ubica estratégicamente la Capilla Real de San Antonio de Padua. Este edificio majestuoso del siglo XVIII fue concebido inicialmente como capilla real, por ello ocupa un punto importante de la plaza y a la vez, se integra a un sistema de arquerías que definen este gran espacio. Su planta es circular, coronada con una cúpula y actualmente está destinada al culto general.

Plaza de las Parejas

Uno de los espacios más conocidos de Aranjuez es la plaza de Parejas, junto al Palacio Real. Esta gran explanada fue en su día escenario de conmemoraciones y juegos ecuestres de la corte. Se llama así por el Juego de Parejas que tenía lugar aquí, una especie de baile a caballo.

Palacio Real de ARANJUEZ

 

Y llegamos al famoso Palacio de Aranjuez, la residencia campestre por excelencia de los Reyes españoles. Felipe II fue el que inició su construcción en 1564. Tres siglos tardaron en concluir las labores, ya bajo el reinado de Carlos III. En 1775, fue precisamente Carlos III quien encomendó a Francesco Sabatini la ampliación de dos alas, que le dan al Palacio su forma característica de “U”. El edificio es un ejemplo del clasicismo de los Austrias, donde se utilizan como materiales principales la piedra blanca y el ladrillo.

Aunque en la visita pública al interior del Palacio Real de Aranjuez no permiten tomar fotografías, al menos, en la entrada, se pueden tomar imágenes de varios elementos que distinguen este espacio. Lo más recomendable es participar en la visita oficial que, en algo menos de una hora, se puede visitar el Salón de Baile, el Comedor de Gala, las estancias reales y el Gabinete de Porcelana, pieza única que es la obra cumbre de la Real Fábrica de Porcelana del Buen Retiro. Además, en el Museo de la Vida en Palacio, se puede apreciar en exhibición el uniforme del rey Juan Carlos I el día de su proclamación en 1975, así como el vestido que lució la reina Sofía ese mismo día. También se puede ver su vestido de novia, además de los de la reina Letizia, la infanta Elena y la infanta Cristina.

Jardines del Parterre

Gracias a la existencia del Palacio Real, se fue creando una red de jardines a su alrededor que son parte fundamental de la visita a Aranjuez. Todos son de entrada gratuita, y cuentan con horarios de acceso. Así llegamos hasta el Jardín del Parterre, ubicado junto a la fachada oriental del Palacio Real. La decoración floral del jardín fue obra del jardinero francés Esteban Boutelou, quien concluyó la obra en 1736. Se considera uno de los pocos ejemplos de jardinería clásica francesa en España.

En el Jardín del Parterre no solo se disfruta de los colores, la belleza y olores de las flores, sino también de una serie de fuentes y estanques, de estilo neoclásico, representando algunas figuras de dioses como la de Hércules, dios protector y de Ceres diosa romana de la agricultura, las cosechas y la fecundidad.

Jardín de la Isla

El camino entre fuentes y flores nos llevó al Jardín de la Isla, que se encuentra situado al norte del Palacio Real de Aranjuez. Considerado una de las obras principales de jardinería del Renacimiento español junto a la Casa de Campo de Madrid, es desde 1931, Bien de Interés Cultural y desde 2001 es Patrimonio de la Humanidad como parte de la declaración Paisaje Cultural de Aranjuez.

Se trata de unos jardines en una isla artificial de aproximadamente 25 hectáreas de extensión, entre el río Tajo y una ría o canal. Sobre esta se encuentran cuatro puentes que servían de acceso al jardín. El trazado del Jardín de la Isla se basa en un eje central muy marcado, rodeado por compartimentos rectangulares que se dividen a su vez en cuadrados. Un jardín, sin dudas, muy bien pensado, organizado y estructurado.

Entre las plazoletas con fuentes que encontramos en el Jardín de la Isla están: la Fuente del Niño de la Espina, la Fuente de Venus y la Fuente del Dios Baco.

Jardín Isabel II

Luego de recorrer el Jardín de la Isla, llegamos nuevamente a la Plaza de San Antonio, para visitar el Jardín de Isabel II, también conocido como Jardín de la Princesita. Se dice que es el primer espacio ajardinado de uso público de esta ciudad y posiblemente uno de los primeros en España de ese tipo. La obra se realizó entre 1830 y 1834.

El jardín presenta un esquema en forma de cruz, mostrando en la plaza central, tras una verja de hierro, la escultura en bronce sobre un pedestal de mármol de Isabel II representada como una niña. Al igual que otros monumentos de Aranjuez, desde 1931, el Jardín de Isabel II es Bien de Interés Cultural y desde 2001 es Patrimonio de la Humanidad como parte de la declaración Paisaje Cultural de Aranjuez.

Lo único que conocíamos de Aranjuez, era el famoso “Concierto de Aranjuez”, obra del compositor Joaquín Rodrigo, una de las obras más queridas y escuchadas del repertorio clásico español y del mundo. Ahora, luego de visitar el Sitio Real y la Villa de Aranjuez, confirmamos la belleza no solo de esa composición, sino de esas tierras que fueron su inspiración.