“(…)A tan diáfano tazón,
tallada perla,
por orlas el aljófar remansado,
y va entre margaritas el argento,
fluido y también hecho blanco y puro.
Tan afín es lo duro y lo fluyente
que es difícil saber cuál de ellos fluye(…)”
Estos versos se encuentran en el perímetro de la taza que es parte de la fuente que encontramos en el Patio de Los Leones en la Alhambra, Granada. A través de estos versos, el poeta Ibn Zamrak describe la fuente central que es sin lugar a dudas, el punto más emblemático del Patio.El Patio de Los Leones, fue mandado a construir por Mohamed V, de planta rectangular y rodeado por una galería de 124 columnas de mármol de color blanco. Su decoración está finamente labrada, como acostumbraba el arte musulmán. De cada sala que rodea el Patio, fluyen cuatro finos arroyos que se dirigen rumbo al centro del Patio de los Leones, son los llamados cuatro ríos del paraíso. Es ahí cuando llega a la Fuente de Los Leones, uniéndose el agua, símbolo de purificación y vida, con la imagen del león, guardián del poder. Además, de mármol, es prácticamente todo el piso del patio. Originalmente, el centro del patio era de jardín bajo, sufriendo muchas modificaciones a lo largo de los años. En estos tiempos, con el fin de evitar la humedad que arrastró de otras épocas, se optó por eliminarlo prácticamente.La fuente de Los Leones, está compuesta de una taza central apoyada en doce leones surtidores de agua realizados en mármol blanco. Si nos fijamos muy bien en cada uno de los leones, observaremos que aunque los doce se encuentran en postura de alerta, con sus colas replegadas, las orejas levantadas, los dientes apretados, es decir, muy pendientes al mínimo gesto u orden del sultán para salir al ataque, aún así, cada uno, mantiene unos rasgos individuales. Se dice que los doce leones representan las doce tribus de Israel vinculadas a los doce hijos que tuvo Jacob. Dos de los leones tienen un pequeño triángulo en la frente que indica las dos tribus elegidas: Judá y Levi. Por otro lado, se señala que los doce leones tienen una clara simbolización astrológica, ya que, además, cada león hace referencia a un símbolo del zodiaco. Sea una cosa o la otra, estos leones son una maravilla tanto en lo artístico como en lo histórico.
por orlas el aljófar remansado,
y va entre margaritas el argento,
fluido y también hecho blanco y puro.
Tan afín es lo duro y lo fluyente
que es difícil saber cuál de ellos fluye(…)”
Estos versos se encuentran en el perímetro de la taza que es parte de la fuente que encontramos en el Patio de Los Leones en la Alhambra, Granada. A través de estos versos, el poeta Ibn Zamrak describe la fuente central que es sin lugar a dudas, el punto más emblemático del Patio.El Patio de Los Leones, fue mandado a construir por Mohamed V, de planta rectangular y rodeado por una galería de 124 columnas de mármol de color blanco. Su decoración está finamente labrada, como acostumbraba el arte musulmán. De cada sala que rodea el Patio, fluyen cuatro finos arroyos que se dirigen rumbo al centro del Patio de los Leones, son los llamados cuatro ríos del paraíso. Es ahí cuando llega a la Fuente de Los Leones, uniéndose el agua, símbolo de purificación y vida, con la imagen del león, guardián del poder. Además, de mármol, es prácticamente todo el piso del patio. Originalmente, el centro del patio era de jardín bajo, sufriendo muchas modificaciones a lo largo de los años. En estos tiempos, con el fin de evitar la humedad que arrastró de otras épocas, se optó por eliminarlo prácticamente.La fuente de Los Leones, está compuesta de una taza central apoyada en doce leones surtidores de agua realizados en mármol blanco. Si nos fijamos muy bien en cada uno de los leones, observaremos que aunque los doce se encuentran en postura de alerta, con sus colas replegadas, las orejas levantadas, los dientes apretados, es decir, muy pendientes al mínimo gesto u orden del sultán para salir al ataque, aún así, cada uno, mantiene unos rasgos individuales. Se dice que los doce leones representan las doce tribus de Israel vinculadas a los doce hijos que tuvo Jacob. Dos de los leones tienen un pequeño triángulo en la frente que indica las dos tribus elegidas: Judá y Levi. Por otro lado, se señala que los doce leones tienen una clara simbolización astrológica, ya que, además, cada león hace referencia a un símbolo del zodiaco. Sea una cosa o la otra, estos leones son una maravilla tanto en lo artístico como en lo histórico.