Los Reyes Católicos en agradecimiento por la victoria en la batalla de Toro de 1476 donde quedó resuelta la sucesión al trono a favor de la princesa Isabel, mandaron a construir el Monasterio de San Juan de los Reyes en Toledo, España. En 1477 el arquitecto Juan Guas comenzó las obras y diez años más tarde, terminaron la capilla mayor, la nave principal de la iglesia y las bóvedas. Su estilo es gótico, del denominado “hispano-flamenco” o del reinado de los Reyes Católicos.
En la fachada del Monasterio San Juan de los Reyes, se refuerza la simbología del poder real por medio de las estatuas de los heraldos.
En total son doce, aquí se aprecian seis. Los heraldos eran personajes encargados de preceder a los monarcas en sus apariciones en público y presentar sus mensajes en cortes de otros reinos. De hecho fue este Monasterio, el primero que se construyó con el fin de que descansaran los restos de los monarcas, aunque al final, fue en Granada, con la construcción de la Capilla Real, su última morada.
Podemos observar en los muros exteriores cadenas y grillos colgando que pertenecieron a los prisioneros cristianos liberados. La reina mandó a colocarlas aquí en el año 1494.
El Claustro
En el Claustro del Monasterio de San Juan de los Reyes, podemos encontrar un jardín con granados, arrayanes, ciprés, naranjo, y otras especies. De planta cuadrada, el patio del claustro suele contar con un lugar en el centro donde se cruzan cuatro caminos. En este caso, en el centro se encuentra el pozo de agua.
Los ventanales que se abren hacia el claustro le permite una iluminación muy especial al recinto. Observamos la piedra bellamente tallada, como si fuera filigrana y encontramos las tallas del escultor toledano Cecilio Béjar, quien también trabajó en la restauración de las imágenes de los santos que pueblan el claustro bajo, eso hasta 1967. Entre las tallas realizadas por Béjar se encuentran dragones, simios, aves fantásticas. Las gárgolas que encontramos tienen la función de aliviar las aguas recogidas del tejado, a manera de desagüe.
En los ventanales centrales que dan hacia el patio, encontramos águilas que sostienen escudos reales entre yugos y haces de flechas. Se usa la crestería, es decir, el calado que se utiliza como adorno y que podemos encontrar en la parte alta de un edificio o de un tejado.
La crestería, bordea el tejado y lo oculta y el uso de los pináculos o agujas le dan mayor altura a la estructura desde el claustro.
La Iglesia del Monasterio
La iglesia del Monasterio de San Juan de los Reyes en Toledo, tiene una sola nave cubierta con bóvedas de crucería, cúpula estrellada sobre el presbiterio, coro alto y capillas laterales entre los contrafuertes. Se destaca la decoración abundante que adorna el crucero y la capilla mayor. En cuanto al retablo del presbiterio, el original desapareció en la guerra napoleónica.
El actual proviene, desde el siglo pasado, del Hospital de Santa Cruz de Toledo, fundado por don Pedro González de Mendoza, Cardenal de la Santa Cruz de Jerusalén. Es por ello que se muestra en el retablo, las armas del cardenal Mendoza, fundador del Hospital. Su autor es Francisco de Comontes, entallador y pintor. En el retablo encontramos las siguientes escenas: Jesús camino del Calvario, El Descendimiento y Santa Elena con los milagros de la Cruz.
No hay visita completa a Toledo, si no se visita el Monasterio San Juan de los Reyes.