Durante la Edad Media, era en la plaza que se ubicaba frente a la fachada sur de la Catedral de Santiago de Compostela y del Claustro donde se reunían los mercaderes a vender sus trabajos hechos en plata. De ahí el nombre de Plaza de la Prateria o Platería.
Era en los bajos del claustro donde se ubicaban los plateros. Razón por la cual, se nombra la Fachada de las Praterias a esta entrada de la catedral. Desde ella se puede apreciar la Torre de Reloj de la Catedral.
Esta pequeña plaza cuenta con la Fuente de los Caballos de estilo barroco, se construye en el año 1825 por J. Pernas, reemplazando la fuente antigua. Es la única fuente que podemos encontrar en plaza alguna alrededor de la Catedral.
Aunque la fuente se le conoce como la Fuente de los Caballos, nos parece curioso que realmente se componga de cuatro hipocampos, lo que según la mitología griega era una combinación de caballo y pez. Se observa que entre estos caballos marinos surge una figura femenina que con su brazo levantado muestra la Estrella de Compostela.
Según la leyenda, esta es la estrella que conduce al descubrimiento de la tumba de Santiago el Apóstol.
Alrededor de la Plaza de la Platería podemos encontrar la Casa del Cabildo y el Museo das Peregrinaciones. Curiosamente, la Casa del Cabildo es una estructura de solo 3 metros de profundidad.
Esta fachada o telón hecho en piedra, se construyó por razones estéticas, dandole un frente al costado del edificio adyacente y dandole vista hacia la plaza. La intención del arquitecto Fernandez Sarela era cerrar de manera casi teatral la plaza. De estilo barroco compostelano, se utilizan placas superpuestas en las paredes exteriores de la estructura, que constan de figuras geométricas.
